
En Colima, Leoncio Morán Sánchez no es el único político que ha sido acusado de recibir fondos del narcotráfico durante su campaña política, si bien es cierto que hay otros en la lista, queda claro que fue el más torpe en ocultar sus narcobeneficos.
El PRI en Colima también cuenta con una larga historia de gobernadores cuyas administraciones han sido influenciadas por las actividades del crimen organizado en la región, entre estos se encuentra Elías Zamora Verduzco, quien fue gobernador de 1985 a 1991, fechas en las que se presume el narco de gran calado ingreso por la puerta grande al palacio de gobierno del estado, y hoy en día no ha salido.
Diversos informes de la policía y reportajes de los medios indican que la llegada del crimen organizado a Colima se remonta a principios de la década de 1980, desde ese momento y hasta el inicio de los años 2000, la entidad fue conocida como “el paraíso del narco”, donde se podía ver a los líderes del narcotráfico “paseando” en la zona, e incluso algunos se establecieron en diferentes lugares de Colima.
A decir de algunos informes de inteligencia, los narcotraficantes vieron a Colima como su nuevo refugio tras huir de Sinaloa por la conocida “Operación Cóndor”.
Juan Manuel Salcido Uzeta, apodado “El Cochiloco”, fue uno de los jefes de la droga que escapó después de ser buscado por diversos delitos; se instaló en el estado en 1985, viviendo en el municipio de Coquimatlán bajo el alias de “Pedro Orozco”. Los residentes lo veían como un agricultor y ganadero exitoso, aunque en realidad estaba involucrado en el tráfico de drogas.
Durante el mandato de Elías Zamora, el narcotraficante se mantuvo en el estado y continuó con su negocio de venta de drogas. Organizó fiestas en su rancho “Jayamita” en Coquimatlán, las cuales contaban con la presencia de empresarios y funcionarios, incluido el gobernador, quien llegó a describir al narcotraficante como “un benefactor del pueblo de Colima”.
“Es cierto que mantenía una relación cercana con el Gobernador Elías Zamora, pero con un propósito táctico, ya que nunca se comprometió demasiado con la élite política de Colima,” además, en varias oportunidades, la prensa documentó encuentros amistosos entre los dos. Manuel Salcido fue asesinado días antes de que Elías Zamora terminara su mandato.